EXPOSICIÓN TEMPORAL

Entre la moda y la tradición.

Colección Madame Rostan

Me dediqué a la moda, porque era mi oficio, y a la artesanía porque era mi gusto. 

Marguerite Rostan

Marguerite Himmel Esslinger de Rostan, Madame Rostan (1907-2006), nacida en Estrasburgo, Francia, llegó a la Ciudad de México a fines de la década de 1920. La cultura, las arraigadas tradiciones y el estilo de vida del país, la cautivaron e influyeron en su decisión de permanecer en México, su segunda patria, y donde El Palacio de Hierro sería su casa durante más de cincuenta años. 

Cuando la tienda departamental se constituye como primera licenciataria en México de los diseños de Christian Dior, Rostan fue la única autorizada por la casa de moda francesa para reproducirlos. 

Entusiasmada por el arte y la cultura indígena de nuestro país, se volvió defensora de las tradiciones populares y comprometida coleccionista. Su sofisticado sentido de la moda y estilo la llevaron a promover el uso de piezas textiles tradicionales con prendas modernas. 

Con el paso de los años y el apoyo de El Palacio de Hierro, Rostan coordinó exposiciones temáticas utilizando piezas de reconocidos coleccionistas y museos de arte popular. Asimismo, organizó pasarelas para mostrar y sensibilizar a la sociedad sobre los orígenes de la moda mexicana y promover diálogos entre la tradición textil y la modernidad. 

La colección de indumentaria, y los eventos en que se presentaron varios trajes en México, Estados Unidos y Francia, la identifican como promotora del gusto por el arte popular textil en el imaginario mexicano. 

La exposición ha sido curada por Marta Turok y Ana Elena Mallet, especialistas en arte popular, y diseño y moda respectivamente, y busca acercar al público a un rico acervo que no se había exhibido anteriormente. 

La muestra inicia con su papel como destacada asesora de imagen y diseñadora, además de su colaboración con Christian Dior para El Palacio de Hierro, pero centra su objetivo en los textiles y trajes de su colección que fueron donados en 2007 al Museo Franz Mayer. Incluye también documentos y fotografías que invitan a reflexionar no sólo acerca de la riqueza de la indumentaria indígena, sino también sobre la visión de una mujer que se enamoró de México y dedicó su vida a fomentar la tradición textil y artesanal, así como la moda del México moderno. 

Esta exposición es posible gracias a la colaboración de El Palacio de Hierro.

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